El palo de lluvia es un antiguo instrumento musical capaz de reproducir un sonido muy parecido al del rugido del agua y que se utilizaba en los antiguos ritos propiciatorios para invocar la lluvia. Para hacerlo necesitas
un tubo largo de cartón, preferiblemente rígido
cartón
papel de aluminio
pegamento
arroz, botones, guijarros pequeños
lápiz, tijeras.
En primer lugar, coloca el tubo sobre la cartulina y con el lápiz dibuja el contorno dos veces: los círculos obtenidos serán las dos tapas de nuestro palo, una de las cuales se pegará inmediatamente. A continuación, planta, de forma aleatoria y dispersa, los clavos en la superficie externa del cilindro y cubre todo con papel de aluminio. Introduce en el interior del cilindro el material de tu elección y, por último, pega el segundo tapón, asegurándote de que el palo quede bien sellado. Puedes decorar el palo de lluvia según tu gusto e imaginación. ¡Diviértete!